3. Las trampas del Mercado de Tierras
María
Luisa Mendonça y Luciano Wolff*
Foto:
Maria Luisa Mendonça
La
llamada "reforma agraria de mercado" - denominación
criticada por los movimientos sociales, por considerar que
tal modelo no hace justicia al término "reforma
agraria" - tiene como base el fomento de la venta de
tierras por parte de los latifundistas a los trabajadores
con poca o sin tierra. Esa política, implementada por
el Banco Mundial en cerca de 30 países en desarrollo,
en teoría debería "aliviar la pobreza rural."
Sin embargo los resultados de varias investigaciones y experiencias
concretas en naciones como Colombia, Brasil, África
del Sur, Guatemala y Tailandia aportan muchos problemas a
las políticas del llamado "mercado de tierras,"incluyendo
el aumento de la pobreza.
El
proyecto del Banco Mundial se contrapone a las propuestas
y luchas históricas de los movimientos sociales rurales
por una reforma agraria amplia y profunda. Muchos trabajadores
rurales, deseando realizar su sueño de acceso a la
tierra para trabajar, se comprometen con préstamos
con tasas de interés de mercado, estimulados por promesas
de una vida mejor. Contrario a ello, ocurre un proceso de
endeudamiento que somete a los campesinos a la desilusión
y expulsión de las tierras adquiridas.
Por
otro lado, esa política genera mayor concentración
de tierra y beneficia a los grandes propietarios que venden
sus peores áreas a precios inflados, en efectivo. Además,
las experiencias muestran que los programas de "reforma
agraria de mercado" estimulan practicas de corrupción
y clientelismo, pues colocan el control del proceso en manos
de las élites rurales.
En
Brasil, por ejemplo, programas como el de Cédula de
la Tierra, Banco de la Tierra y Crédito de Tierra y
de Combate a la Pobreza, vienen siendo ejecutados con apoyo
financiero y aval político del Banco Mundial. Esos
programas van en sentido contrario al precepto legal que determina
la desapropiación como el principal instrumento de
obtención de tierras improductivas. La constitución
brasileña establece que las tierras agrícolas
deben cumplir su función social, o sea, deben producir
alimentos y respetar las leyes ambientales y de trabajo. En
caso de que esto no sea así, el gobierno debe expropiar
esas áreas para fines de reforma agraria y asentamiento
de familias sin tierra.
Al
sustituir la expropiación debido a intereses sociales
por la compra y venta de tierras, el estado deja de cumplir
su obligación constitucional. De esa forma, no hay
penalización al latifundio, sino su valoración
pues son los hacendados que pueden decidir vender o no sus
tierras. Una expansión del mercado de tierras acaba
en muchos casos provocando un encarecimiento de los precios
y, consecuentemente, beneficiando a los grandes latifundistas.
En
centenas de países, las políticas de Ajuste
Estructural, defendidas por el Banco Mundial, han estimulado
la privatización de tierras indígenas, de afro
descendientes y de otras comunidades rurales, además
de la privatización del agua y selvas, aumentado las
desigualdades sociales. La creación de mercados de
tierras, se coloca en este contexto más amplio.
La
gran semejanza entre las fórmulas aplicadas por el
Banco Mundial y sus impactos negativos en diversos países
generó un movimiento internacional de oposición
a la política de "reforma agraria de mercado."
Muchas organizaciones sociales - como la Vía Campesina,
la Red de acción e Investigación sobre la Tierra
(LRAN) y la Red de acción e Información sobre
Alimentos (FIAN) - iniciaron un trabajo de articulación,
con el objetivo de sistematizar y divulgar tanto las denuncias
sobre los proyectos del Banco Mundial como las propuestas
construidas a través de las experiencias de trabajadores
rurales.
Esas
organizaciones demandan la inmediata suspensión de
los programas de mercado de tierras y la democratización
del acceso a la tierra por medio del la expropiación,
con amplia participación de los movimientos sociales
rurales. Los movimientos sociales quieren garantizar el derecho
a la tierra para los trabajadores rurales a través
de una verdadera reforma agraria, acompañada de una
política agrícola consistente, de forma que
garantice la soberanía alimentaria de sus naciones.
(Armadilhas
do Mercado de Terras, articulo de María Luisa Mendoçca
y Luciano Wolff, publicado en Jornal do Brasil)
4.
África del Sur
5.
Brasil
6.
Colombia
7.
Guatemala
8.
India
9.
México
10.
Tailandia
11.
Zimbabwe
12.
Las políticas de la Vía
Campesina
13.
Bibliografia
14.
Expediente
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